Bernarda y Fernanda de Utrera
Fernanda y Bernarda Jiménez Peña, nacidas el 09/02/1923 y 03/03/1927 respectivamente, en el n° 20 de la gitanísima calle Nueva, hijas de José Jiménez Fernández y de Inés Peña Vargas, naturales de Utrera, nietas de Andrés Jiménez Torres, de Utrera, y de Aurora Fernández Camacho, de Alcalá, en línea paterna, y de Fernando Peña Soto, de Lebrija y de Josefa Vargas Torres, de Utrera en línea materna, son además descendientes de un largo etcétera de una larga dinastía de familias gitanas que saben y conocen las veredas y los secretos de lo que es y significa el mejor arte. Pertenecen a la familia flamenca de Los Pinini, que ha dado grandes artistas.
Nacieron al cante en la intimidad de una familia gitana, bajo la mirada celosa de un padre que no admitía, de ninguna de las maneras, que sus hijas fueran artistas y, pese a ello, intervinieron en la película "Duendes y Misterios del Flamenco", de Edgar Neville, en 1948, y accedió, por aquel respeto y admiración que profesaba por Antonio Mairena, a que de su mano y confianza, grabaran un disco; y así, en aquel " Sevilla cuna del cante", en que Bernarda hace una antológica versión del aire inconfundible e inigualable de la bulería de Utrera, y Fernanda escribe el cante de La Serneta como hasta entonces no lo había hecho nadie, incluyendo las más prestigiosas voces que tuvieron la dicha de recibir la transmisión directa, así, el mundo del flamenco supo, que el pueblo de Utrera tenía el secreto, que guardaba el tesoro y que en Utrera dormía la criaturización del cante. Posteriormente, entre los años 1962 a 1964, ambas hermanas actuaron en el tablao ‘Las Brujas’ de la capital española. Tras su paso por la Feria Mundial de Nueva York, Bernarda, es contratada por el conjunto flamenco de Manuela Vargas, con el que recorre Europa y parte de África.